Caen trozos de cielo entre mis manos,
Dios sólo te odia
Sinó eres lo suficientemente bueno para decir TE QUIERO.
Arrojo mi pastilla efervescente en tu vaso de alcohol.
Siento el poder de un golpe que no me hace daño.
Creo equivocarme en cada paso acertado que doy.
Abandono mi alma un par de veces al día.
Y siento que el abismo ya no es mi puerta de atrás.
Oigo las gotas de lluvia chocar contra las hojas.
Como el agua moja mi cuerpo, y la tierra envuelve mis pies.
Que estas pequeñas cosas me hacen sentir tan grande.
Que en un mundo tan grande, todos nos sentimos pequeños.
Dios sólo te odia
Sinó eres lo suficientemente bueno para decir TE QUIERO.
Arrojo mi pastilla efervescente en tu vaso de alcohol.
Siento el poder de un golpe que no me hace daño.
Creo equivocarme en cada paso acertado que doy.
Abandono mi alma un par de veces al día.
Y siento que el abismo ya no es mi puerta de atrás.
Oigo las gotas de lluvia chocar contra las hojas.
Como el agua moja mi cuerpo, y la tierra envuelve mis pies.
Que estas pequeñas cosas me hacen sentir tan grande.
Que en un mundo tan grande, todos nos sentimos pequeños.
(Noches de marzo)
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